Existen sistemas con resultados
equiparables al puerta a puerta que se aplican en municipios
guipuzcoanos, basados en la voluntariedad, en la racionalidad económica,
en la eficiencia, en la estética y en el respeto a la intimidad.
En la Norma Foral de Residuos nos marcábamos como objetivo para el año 2016 llegar a niveles de recogida selectiva en torno al 60%, y el año 2015 revisar los niveles obtenidos y analizar las medidas a implementar para seguir avanzando hacia el objetivo de llegar a los niveles de reciclaje de los países más avanzados de Europa en gestión de residuos. Por eso se impulsaron desde la diputación en colaboración con las distintas mancomunidades sistemas de mejora de recogida de residuos.
Si el año 2003 el porcentaje de los residuos domiciliarios recogidos selectivamente era del 20%, ya el año 2010, se acercaba al 35%. Y a día de hoy, en municipios del Goierri donde se ha venido trabajando hacia la aplicación del sistema como en Lazkao, el porcentaje de recogida selectiva es ya superior al 45%. Sistema basado en la profundización de las posibilidades que ofrece la contenerización y la aplicación de las tecnologías inteligentes.
Los guipuzcoanos somos, no quepa duda, un ejemplo a seguir en recogida selectiva de residuos. En la medida en que se han ido poniendo los medios, los distintos contenedores, los resultados han ido mejorando sin parar. Pero ya desde la pasada legislatura la oposición de la izquierda abertzale a la implantación del quinto contenedor para residuos orgánicos, el marrón, ha impedido que en determinadas comarcas haya podido desplegarse: Debagoiena, San Marcos y Tolosaldea son claros exponentes de ello. El "Puerta a Puerta o nada" ha impedido seguir mejorando los resultados de recogida selectiva. Ni contigo ni sin ti, que se dice.
Y la verdad es que en aquellos pueblos en los que se está desplegando el contenedor marrón los resultados están siendo espectaculares. La mayor parte de la bolsa que iba al contenedor verde está empezando a engordar el contenedor marrón, reduciéndose así el volumen destinado al contenedor verde.
Siendo esto un hecho, la mancomunidad de Sasieta, gobernada por EAJ/PNV la pasada legislatura, inició en Itsasondo una experiencia piloto que consistía en mantener cuatro de los contenedores (iglú verde para el vidrio, azul para papel/cartón, amarillo para los envases y marrón para la materia orgánica), retirar el verde (fracción resto) y poner en su lugar txintxilikarios (postes con colgadores identificativos de las viviendas de la zona) en la misma zona de los contenedores. La recogida de los txintxilikarios se hace una vez por semana, los lunes. Los resultados han sido espectaculares. El aumento de la recogida selectiva ha sido prácticamente de un 50%, pasando de 6.883 kilos mes a 10.270. Más espectaculares que los que se atribuyen al puerta a puerta de Hernani, Oiartzun, Usurbil y Antzuola, en los que, dicen, se recoge selectivamente el 80%. Si sólo nos fijamos en lo que se recoge tras la implantación del sistema, como lo hacen en esos pueblos, en Itsasondo asciende al 92%. Pero, siempre hay algún pero, en Itsasondo ha desaparecido un 37,7% de la basura. Se va de "turismo" a otros pueblos vecinos (lo llevan donde van a trabajar…). Casi un 40% de la población no quiere que sus basuras sean expuestas al público ni siquiera una vez por semana. Porcentaje similar, al menos, al que "desaparece" en los pueblos con PaP. Con el agravante de que en los pueblos con puerta a puerta toda la basura, de lunes a domingo, está expuesta a los ojos de los curiosos. Y si has bajado la basura fuera de las horas establecidas, todo el día expuesta en el txintxilikario. Culpable. Como en los tiempos de la Inquisición, con Torquemada. Y la intimidad es uno de los derechos fundamentales de las personas.
A la vista de esta situación, en un paso más a la innovación en la recogida de residuos, Lazkao, también gobernado por EAJ la pasada legislatura, inició de forma experimental el modelo de la apertura de contenedores con tarjeta individual. La idea es, en principio, para los contenedores de materia orgánica (marrón) y resto (verde), pero puede extenderse al resto de los contenedores. Tanto para la apertura (los días que se establezcan) como forma, a futuro y mediante sistemas de pesaje, de bonificar a las familias que más reciclen.
Los resultados que se están obteniendo tanto en Itsasondo ( aplicable en municipios de baja densidad) como en Lazkao y municipios del Goierri, deja en evidencia el sinsentido del sistema de puerta a puerta.
Premiar, motivar, a quien lo hace bien. Y preservando la intimidad.
Este es el futuro. Este es nuestro modelo. No imponer, ni acabar penalizando al que lo hace bien, que es en lo que acaba de convertirse el puerta a puerta. El contenedor debe ser, para los residuos, como los contadores de consumo para el agua.
Más de 27.000 firmas recogidas a día de hoy, solamente en algunos municipios donde se quiere imponer el puerta a puerta, y el reciente anuncio en otros municipios de la puesta en marcha de varias plataformas de recogida de firmas, dan muestra de la contundente respuesta que la sociedad está dando a esta imposición. Nunca en la reciente historia política de Gipuzkoa se había conocido semejante movilización social.
Desde aquí invito a la izquierda abertzale a que abandone sus pretensiones impositivas en el despropósito del puerta a puerta, que es más caro, atenta contra la intimidad, y no obtiene mejores resultados que un sistema avanzado e innovador, de recogida mediante contenedores.
Creo que a Bildu le toca actuar con responsabilidad y plantear vías de solución y diálogo.
KARLOS ORMAZABAL Garapen iraunkorreko diputatu ohia.
En la Norma Foral de Residuos nos marcábamos como objetivo para el año 2016 llegar a niveles de recogida selectiva en torno al 60%, y el año 2015 revisar los niveles obtenidos y analizar las medidas a implementar para seguir avanzando hacia el objetivo de llegar a los niveles de reciclaje de los países más avanzados de Europa en gestión de residuos. Por eso se impulsaron desde la diputación en colaboración con las distintas mancomunidades sistemas de mejora de recogida de residuos.
Si el año 2003 el porcentaje de los residuos domiciliarios recogidos selectivamente era del 20%, ya el año 2010, se acercaba al 35%. Y a día de hoy, en municipios del Goierri donde se ha venido trabajando hacia la aplicación del sistema como en Lazkao, el porcentaje de recogida selectiva es ya superior al 45%. Sistema basado en la profundización de las posibilidades que ofrece la contenerización y la aplicación de las tecnologías inteligentes.
Los guipuzcoanos somos, no quepa duda, un ejemplo a seguir en recogida selectiva de residuos. En la medida en que se han ido poniendo los medios, los distintos contenedores, los resultados han ido mejorando sin parar. Pero ya desde la pasada legislatura la oposición de la izquierda abertzale a la implantación del quinto contenedor para residuos orgánicos, el marrón, ha impedido que en determinadas comarcas haya podido desplegarse: Debagoiena, San Marcos y Tolosaldea son claros exponentes de ello. El "Puerta a Puerta o nada" ha impedido seguir mejorando los resultados de recogida selectiva. Ni contigo ni sin ti, que se dice.
Y la verdad es que en aquellos pueblos en los que se está desplegando el contenedor marrón los resultados están siendo espectaculares. La mayor parte de la bolsa que iba al contenedor verde está empezando a engordar el contenedor marrón, reduciéndose así el volumen destinado al contenedor verde.
Siendo esto un hecho, la mancomunidad de Sasieta, gobernada por EAJ/PNV la pasada legislatura, inició en Itsasondo una experiencia piloto que consistía en mantener cuatro de los contenedores (iglú verde para el vidrio, azul para papel/cartón, amarillo para los envases y marrón para la materia orgánica), retirar el verde (fracción resto) y poner en su lugar txintxilikarios (postes con colgadores identificativos de las viviendas de la zona) en la misma zona de los contenedores. La recogida de los txintxilikarios se hace una vez por semana, los lunes. Los resultados han sido espectaculares. El aumento de la recogida selectiva ha sido prácticamente de un 50%, pasando de 6.883 kilos mes a 10.270. Más espectaculares que los que se atribuyen al puerta a puerta de Hernani, Oiartzun, Usurbil y Antzuola, en los que, dicen, se recoge selectivamente el 80%. Si sólo nos fijamos en lo que se recoge tras la implantación del sistema, como lo hacen en esos pueblos, en Itsasondo asciende al 92%. Pero, siempre hay algún pero, en Itsasondo ha desaparecido un 37,7% de la basura. Se va de "turismo" a otros pueblos vecinos (lo llevan donde van a trabajar…). Casi un 40% de la población no quiere que sus basuras sean expuestas al público ni siquiera una vez por semana. Porcentaje similar, al menos, al que "desaparece" en los pueblos con PaP. Con el agravante de que en los pueblos con puerta a puerta toda la basura, de lunes a domingo, está expuesta a los ojos de los curiosos. Y si has bajado la basura fuera de las horas establecidas, todo el día expuesta en el txintxilikario. Culpable. Como en los tiempos de la Inquisición, con Torquemada. Y la intimidad es uno de los derechos fundamentales de las personas.
A la vista de esta situación, en un paso más a la innovación en la recogida de residuos, Lazkao, también gobernado por EAJ la pasada legislatura, inició de forma experimental el modelo de la apertura de contenedores con tarjeta individual. La idea es, en principio, para los contenedores de materia orgánica (marrón) y resto (verde), pero puede extenderse al resto de los contenedores. Tanto para la apertura (los días que se establezcan) como forma, a futuro y mediante sistemas de pesaje, de bonificar a las familias que más reciclen.
Los resultados que se están obteniendo tanto en Itsasondo ( aplicable en municipios de baja densidad) como en Lazkao y municipios del Goierri, deja en evidencia el sinsentido del sistema de puerta a puerta.
Premiar, motivar, a quien lo hace bien. Y preservando la intimidad.
Este es el futuro. Este es nuestro modelo. No imponer, ni acabar penalizando al que lo hace bien, que es en lo que acaba de convertirse el puerta a puerta. El contenedor debe ser, para los residuos, como los contadores de consumo para el agua.
Más de 27.000 firmas recogidas a día de hoy, solamente en algunos municipios donde se quiere imponer el puerta a puerta, y el reciente anuncio en otros municipios de la puesta en marcha de varias plataformas de recogida de firmas, dan muestra de la contundente respuesta que la sociedad está dando a esta imposición. Nunca en la reciente historia política de Gipuzkoa se había conocido semejante movilización social.
Desde aquí invito a la izquierda abertzale a que abandone sus pretensiones impositivas en el despropósito del puerta a puerta, que es más caro, atenta contra la intimidad, y no obtiene mejores resultados que un sistema avanzado e innovador, de recogida mediante contenedores.
Creo que a Bildu le toca actuar con responsabilidad y plantear vías de solución y diálogo.
KARLOS ORMAZABAL Garapen iraunkorreko diputatu ohia.
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