KONTSULTARI BAI

“Queremos que la Ley se apruebe, que se celebre la consulta y que no haya ningún gobernante que se tenga por demócrata que pretenda impedir su celebración”, afirma el PNV.

Egibar se ha preguntado “en qué le perjudica a un gobernante conocer la opinión de la ciudadanía” y, en el caso de que no le interese conocerla, “cómo puede instalarse en la decisión de querer impedir que la ciudadanía exprese su opinión”

El portavoz de EAJ-PNV, Joseba Egibar, ha manifestado su convencimiento de que lo que subyace en la postura contraria del PP y del PSOE a la tramitación de la Ley de Consulta no es una cuestión de tipo jurídico sino de voluntad política.

Tras señalar que serán los grupos parlamentarios los que dictaminen si se aprueba una Ley de Consulta Popular para el 25 de octubre, ha asegurado que “nosotros aspiramos y deseamos que se produzca la aprobación y que se pueda celebrar la consulta el día 25 de octubre”.

Ante las amenazas de impugnación ante el Tribunal Constitucional por parte de Zapatero e incluso la de suspensión de la autonomía que anuncia Alfonso Guerra, Egibar ha advertido de la gravedad que conllevarían decisiones de este tipo. En este sentido, ha indicado que “bueno sería formularles estas dos preguntas a quienes manifiestan vocación de querer impedir la consulta”. Las preguntas son las siguientes:

“¿En qué perjudica a un político, a un gobernante -al presidente Rodríguez Zapatero, en este caso- conocer la opinión de la ciudadanía sobre dos cuestiones que afectan a la sociedad vasca, dos preguntas que intentan, desde una modalidad de consulta no vinculante, abrir un camino de normalización política y de consecución de un escenario de paz?”

Y si fuera que no interesa conocer la opinión de la ciudadanía porque se entiende que ya se conoce, o son preguntas irrelevantes, ¿cómo puede ser que un gobernante se instale en la decisión de querer impedir que la ciudadanía exprese su opinión?”

Nada más formular esta segunda pregunta, Egibar ha expresado, con contundencia, que “eso –impedir que la ciudadanía opine- no casa con los principios de un sistema democrático, porque, lejos de fortalecerlo, lo debilita”. Además, ha incidido en que una decisión de esas características“ nos incorpora un tercer problema a los que ya tenemos –y que intentamos resolver a través de esta consulta: el tema de la paz y la normalización política-; un problema que, desde el punto de vista de la estructura de un sistema democrático, reviste gravedad: que tengamos un gobernante que, no sólo no quieren conocer la opinión de la ciudadanía, sino que tienen vocación y decisión de impedir que se conozca la voluntad de la ciudadanía”.

El portavoz jeltzale ha realizado estas declaraciones tras la Junta de Portavoces en la que se ha rechazado el escrito de reconsideración del Proyecto de Consulta presentado por el PP.