Mompás, Pasaia y el interés general Xabier Ezeizabarrena a Odon Elorza

Mompás, Pasaia y el interés general xabier ezeizabarrena

Cuando la demagogia alcanza los límites expresados en la reciente carta al director del Alcalde de Donostia (Dos varas de medir , 26-4) comparando el interés general que atribuye a su Pasarela de Mompás frente al puerto exterior de Pasaia y la regeneración de dicha bahía, no queda más remedio que clarificar, en lo posible, el peculiar interés que tiene nuestro alcalde por mezclar el tocino con la velocidad. Pero, ¿por qué razón el Gobierno municipal de Donostia no hizo un solo comentario al Decreto de Protección que incluye Mompás como zona de protección estricta cuando se remitió el proyecto de Decreto al ayuntamiento en 2007? ¿No será que nuestro alcalde ha buscado esta polémica de manera artificial y voluntaria?

Se trata de un ejemplo perfecto de su forma de hacer política banalizando la realidad y buscando, a futuro y en el fondo, urbanizar una parte de nuestra costa más agreste para acabar privatizando Sagüés con la ubicación de un hotel de 5 estrellas cuyo volumen inicial era nada menos que de 12 pisos en el primero proyecto del Alcalde. Porque pretender comparar el interés general de una pasarela peatonal para, según dice Elorza, "levitar al ver las puestas de sol", en un lugar al que se podría acceder a pie con mínimas actuaciones de mejora e integrando el sendero en Ulía, con el interés general que representa el único puerto mercante de Gipuzkoa, sus puestos de trabajo, su aportación sustantiva a nuestra economía y la necesidad de regenerar la bahía interior, es algo que cae por su propio peso.

De hecho, el Puerto de Pasaia está catalogado por las leyes como un puerto de interés general, de modo que su importancia estratégica para Gipuzkoa no precisa de mayores comentarios o calificaciones. Es que el Puerto de Pasaia es de hecho y de Derecho una infraestructura de interés general. Tal es la importancia del puerto y de la regeneración de la bahía de Pasaia, incluso para Donostia, que sin ella tampoco sería posible promover un puerto deportivo en La Herrera como algunos hemos defendido.

Curiosamente, Elorza también se ha apuntado hace poco a ese carro, si bien ahora no parece apoyar la regeneración de esa bahía interior. Cabe recordar igualmente la promoción previa por parte de Elorza de proyectos de puertos deportivos en Donostia en el propio Mompás inicialmente y, con posterioridad, nada menos que en pleno Paseo Nuevo con un muelle de protección de entre 10 a 12 metros de altura. Todos ellos son buenos ejemplos de un ejercicio de la política basada en la ficción y el marketing a golpe de infografía. Eso sin contar el coste para los donostiarras de cada uno de estos proyectos que luego no se ejecutan o el Alcalde acaba guardando en el cajón del despacho.

Frente a este modelo de ficción y que mezcla el interés general con el interés exclusivo del puro marketing político, hay ciudades como Cardiff o Bilbao, entre otros ejemplos en Europa, confluyendo en ambos casos situaciones fluviales y portuarias de gran degradación urbana, que han reconvertido sus realidades hacia esa absoluta revolución urbanística y de planificación general que tan necesaria se hace en el caso del complicado entorno de Pasaia. Una operación, indudablemente, de interés general y carácter estratégico para Donostialdea, para Pasaia y para toda Gipuzkoa.

Volviendo a Donostia, nosotros compartimos el objetivo de poder alcanzar la Punta de Mompás. Otra cosa es cómo hacerlo y apostamos por hacerlo a pie por una décima parte del coste del proyecto del Alcalde, a través de un sendero integrado en el monte Ulía y en sus interesantes valores naturales y paisajísticos. Esto es algo mucho más ambicioso y sostenible que una mera pasarela de ida y vuelta incomunicada con el monte. Cabría invertir, por ejemplo, el dinero restante en una actuación básica para Donostia como es la depuración del 100% de las aguas residuales que la ciudad vierte al mar y que todavía no se depuran en su totalidad.

Más que levitar viendo nuestras puestas de sol, deberíamos preocuparnos de veras por ser una de las únicas capitales de la península que incumple las Directivas europeas sobre depuración de aguas residuales. Eso sí que exige un remedio para tutelar el interés general y una apuesta por la ecología real, en una ciudad demasiado dominada por la infografía y la levitación política.

* Portavoz de EAJ/PNV en el Ayuntamiento de Donostia